Escribo desde la emoción de quién siente sus plumas inquebrantables. No hay quién me arranque ni una más sin tener que lidiar con este derroche de cariño y arrope que, vosotros, mi público, volvéis a mostrarme.
No me gustan los pódiums, a veces parece que desmerecen el trabajo y esfuerzo de muchos que no están ahí pero que siguen tratando de abrirse paso en esta industria, la misma industria para todos. Noticias como las de hoy, sin duda nos ayudan a seguir trabajando, a seguir creyendo que merece la pena dejarse el pellejo desde este pequeño rincón del mundo.
No he llegado sola hasta aquí, ni los que me acompañan, vosotros nos habéis traído dejando que nuestra mota de polvo despunte en un rayo de luz en medio de un universo enorme dejando una estela.
Sois Campanilla dejándonos volar a Nunca Jamás convirtiéndolo en Por Siempre Quizás. Gracias a todos los que en esta semana me habéis regalado este momento feliz, premiando el esfuerzo de muchos y una forma de hacer las cosas (si, también todos los que os hicisteis con la Collector’s, que no suman en listas pero suman en un propósito de valores muy importantes que también tienen/deben estar presentes en la música como la sostenibilidad, la artesanía y la inclusión social).
Gracias de mi parte, de parte de todos los que han hecho posible Mirlo Blanco.
Y con vuestro permiso hoy quiero dedicar este regalo que nos habéis hecho a ellos, los artífices, los que en algún punto del vuelo de este Mirlo Blanco pusieron todo su talento. Un equipo enorme de personas que hoy, como yo, sonríen y disfrutan.
No, no me gustan los pódiums, pero me encantan las bandejas. Gracias por esta preciosa bandeja de plata y esa dorada en forma de vinilo.
Hoy, día 2 de la semana, día 22 del mes 2, del año 2022, (22022022) solo me sale sonreír feliz y cantarme por el maestro Serrat “cuéntale a tu corazón, que existe siempre una razón escondida en cada gesto. Del derecho y del revés, uno solo es lo que es y anda siempre con lo puesto. Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio”.
Esta verdad tan bonita, la de renacer, es rotunda y por suerte sin remedio.
Nos vemos en la gira… ¡Esto realmente acaba de empezar!
V.
